El pasado sábado 2 de diciembre la Fanfarria Transfeminista cumplía 5 años, tras pasar un rato juntas tocando en la calle, nos fuimos a celebrar con la mala suerte que a la vuelta nos habían sacado los instrumentos del maletero del coche.
Dos saxofones, una trompeta, un bombardino, varios instrumentos de percusión, y otros efectos personales (entre ellos el bote que habíamos recaudado) nos fueron robados en la zona de Marqués de Vadillo. Nuestra sorpresa y tristeza fueron enormes, pues en la Fanfarria cada persona aporta su instrumento con toda la ilusión y el esfuerzo que ello conlleva y, como grupo precario y autogestionado que somos, no contamos con recursos para poder hacer frente a este robo y remplazarlos.
Nuestros instrumentos son la voz de la Fanfarria y los pilares de todo lo que construimos en colectivo; dan volumen a todas aquellas luchas que nos atraviesan y en las que creemos, para resonar juntas en las calles.
Durante todos estos años el espíritu de la Fanfarria ha sido apoyar de manera altruista aquellas causas que han requerido de nuestra presencia.
Necesitamos vuestra ayuda para reponer nuestros instrumentos y poder seguir haciéndolo con la alegría y rabia que nos caracteriza.
[ACTUALIZACIÓN: Tras haber recuperado solamente la trompeta, hemos actualizado el valor del crowfunding, pues damos por perdidos el resto de los instrumentos definitivamente]
Necesitamos comprar los instrumentos que nos han sido robados:
- Saxofón alto Yamaha YAS480 o equivalente
- Saxofón alto Yamaha YAS275 o equivalente
Trompeta Bach Prelude TR600 o equivalente [ACTUALIZACIÓN: Recuperada]
- Bombardino Cantabile Mardibrass sintético morado
- Platillo para caja y soporte
- Otros instrumentos de pequeña percusión
Este proyecto va dirigido a todas aquellas personas que quieran apoyar a la Fanfarria Transfeminista y deseen asegurar la supervivencia de un colectivo musical y activista autogestionado e independiente.
La Fanfarria Transfeminista se crea en el encuentro de personas inquietas que buscan colectivizarse desde dos pilares: la música y el activismo. El activismo como grito musical y la música como lenguaje de cambio.
Nos juntamos unas cuantas raras con clarinetes, tambores, trompetas, saxos, flautas, trombones, bombos, cajas o sartenes, voces y gritos para compartir a través del sonido, contarnos qué fue de la semana en nuestro aliento. Soplamos y percutimos para invocar una fuerza que disuelva el sonido reglado, la escucha normal, todo aquello que esté sonando para oprimirnos.
Esta fanfarria se armoniza en el encuentro. Cada una se afina a través de le otre. Toca escuchando a la de enfrente y canta proclamas a coro y en estribillo, en multitud y en las calles. Porque confiamos en que el sonido que sale del cuerpo llega tan lejos tan lejos como al corazón de la que lo quiera escuchar.
Por qué sonamos
La Fanfarria Transfeminista suena porque siente: rabia, ganas de cambiar las cosas, alegría de compartir esa rabia y esas ganas con otras personas.
Nuestra lucha es, fundamentalmente, transfeminista, antirracista, anticapitalista: términos para señalar una realidad insoportable de violencia y desigualdad. El sistema productivista y patriarcal, las políticas racistas y coloniales, la represión y el control social, la negación de la crisis climática, son algunos de los tentáculos de un sistema autodestructivo.
Seguiremos saliendo a la calle para protestar contra el racismo institucional, contra las LGTBIQAP+fobias, contra la cultura de la violación, contra el discurso del odio al diferente y las políticas genocidas. Para denunciar la falla estructural del sistema hegemónico y decir que no vamos a soportar más soluciones mercantilizadas, que pasan por salvar a las grandes corporaciones financieras y siguen aumentando las brechas de la desigualdad y denostando a lo público y al cuidado.
Sonaremos por defender la cultura de lo colectivo, la no discriminación de los cuerpos, las redes de apoyo mutuo como bases sostenedoras de la vida. Lucharemos por una economía local y ecodependiente, construída en base a los cuidados. Soñaremos con el mapa borrado y la libre circulación de personas por el planeta. Sonaremos para acallar los discursos del miedo y contagiarnos de afecto.
Quiénes sonamos
La Fanfarria es un espacio abierto. Se trabaja para que no cese de ser un espacio seguro y acogedor a toda elección sexual, devenir de género, personas racializadas, en transición, migrando, de todas identidades, edades, antecedentes, diversidades funcionales, niveles de habilidad musical o forma de vida disidentes. El cuidado desde la escucha atenta es lo que produce nuestra peculiar afinación torcida, herramienta de no exclusión radical de toda vida que quiera sonar en colectivo. No favorecemos el espacio no mixto, pero lo entendemos, respetamos y apoyamos.
Desde noviembre de 2023, la Fanfarria Transfeminista forma parte del espacio Eskalera Karakola.